La reducción mamaria o mamoplastia de reducción es una técnica quirúrgica que tiene como objetivo cambiar el tamaño y la forma de la mama para que se adapte a las necesidades estéticas y funcionales de cada paciente.
Beneficios de la mamoplastia
Esta técnica quirúrgica sobresale en términos de estética y satisfacción funcional. El volumen o flacidez de la mama puede incomodar el día a día de la paciente tanto por el peso que representa como por los daños que puede causar en la piel y los hombros.
Por otro lado, también puede causar dolor en la parte baja de la espalda, lo que requiere el uso de un sostén especial, lo que dificulta su uso libre.
La mayoría de las pacientes acuden a consulta para valoración por presentar mamas grandes o asimetría moderada o severa. Muchas mujeres tenemos una ligera asimetría porque los lados de nuestro cuerpo no son iguales.
El aumento de senos o mastopexia para aumentar los senos se conoce desde hace muchos años como una intervención mamaria, pero los problemas asociados con el aumento no han recibido mucha atención, por lo que muchas mujeres que se someten a un a este tratamiento están mal informadas.
¿Cómo es la intervención?
Las intervenciones de mamoplastia deben realizarse después de que la paciente esté completamente desarrollada y hormonalmente estable, lo que significa comenzar alrededor de los 17 o 18 años.
Esto se hace bajo anestesia general y dura de 2 a 3 horas. Por lo general, los ingresos no superan las 24 horas, pero las pacientes deben seguir las pautas domiciliarias durante 15 días y usar sostén postoperatorio, lo que se recomienda de uno a dos meses, según la evolución.
¿Cómo es el postoperatorio?
En el postoperatorio tras la intervención no habrá dolor de ningún tipo, pero sí tensión, que puede tratarse con medicamentos convencionales. A las dos semanas se realiza una primera visita de control para confirmar que las suturas se han reabsorbido y que el paciente se encuentra bien. A partir de ese momento, puede volver a su vida diaria normal.
La mamoplastia deja una cicatriz en forma de T invertida, aunque esto no suele ser un problema para las pacientes ya que los beneficios de la intervención son mayores.
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