Muchos de los doctores de Cirugía Plástica, Estética y Reparadora consideran recomendable el uso de inyección de grasa para las operaciones de aumento de mama, por las ventajas que tiene ya que evita las complicaciones de otras técnicas.
Ventajas del aumento mamario con grasa
Esta técnica es conocida como lipoescultura o lipotransferencia de grasa y se caracteriza por la ausencia de prótesis ya que está basada en el injerto de grasa obtenido de otras partes del cuerpo para inyectarlos en la mama. Se trata de una cirugía indolora y el tacto que se consigue con ella es muy natural.
Otra ventaja es que la mama envejece naturalmente, las cicatrices son pequeñas y casi invisibles y también se reducen los depósitos localizados de grasa en las zonas del cuerpo de donde se ha extraído la grasa, como las piernas, cadera o abdomen.
La lipoescultura se utiliza sobre todo en aumentos mamarios moderados, para corregir asimetrías y para quienes quieran quitarse la prótesis. También se utiliza como técnica para mejorar el relleno en los implantes o atenuar sus borden en personas muy delgadas, corregir deformidades, cicatrices deprimidas o el rippling y mejorar la calidad de la piel, sobre todo en pacientes sometidos a radioterapia.
Con esta técnica se pretende evitar los riesgos asociados a los implantes, eso sí, no es hasta pasados los 8 meses cuando se pueden empezar a apreciar los resultados definitivos ya que un porcentaje de la grasa inyectada puede no haberse absorbido y habría que intervenir de nuevo hasta obtener un resultado estable.