La lipoescultura tiene como objetivo la remodelación del cuerpo y es una técnica que ayuda a eliminar los depósitos de grasa para lucir una figura envidiable.
¿A quién va destinada la lipoescultura?
No se trata de de un programa de adelgazamiento como tal, por lo que si quieres perder peso de manera generalizada debes buscar otro tratamiento. Y es que una de las contraindicaciones de la lipoescultura es la obesidad, por lo que el paciente que sufra esta afección deberá perder primero kilos para, posteriormente, retirar grasa de forma localizada y remodelar así su figura.
De igual forma, las personas que padecen alergia a ciertos medicamentos que se utilizan y suministran durante la intervención y en el post-operatorio no pueden someterse a esta cirugía y los menores de edad tampoco.
Tampoco es válida para mujeres embarazadas, que deben esperar a dar a luz para recibir tanto lipoescultura invasiva como no-invasiva, así como es recomendable que hayan acabado también el periodo de lactancia.
Si sufres enfermedades cardiovasculares, hipertensión arterial o diabetes tampoco debes entrar en quirófano para someterte a una lipoescultura, ni tampoco aquellas personas que estén tomando cierta medicación como anticoagulantes o antiinflamatorios, ya sea por dolencias crónicas o de manera puntual.
El cirujano estético deberá precisar cuándo han de dejar de medicarse en los casos en los que presenten problemas médicos puntuales.
Lipoescultura en mujeres y hombres
El mundo de la estética, ya no solo pertenece a las mujeres y cada día son más los hombres que se animan a cuidar su cuerpo. Es apta tanto para hombres como para mujeres que cumplan los requisitos médicos necesarios pero, no obstante, el cuerpo de unos y de otras es diferente y, por lo tanto, también lo es este tratamiento.
Un ejemplo es que los hombres tienden a acumular más grasa en la zona abdominal, lo que hace aumentar su perímetro abdominal y, con ello, el riesgo de sufrir problemas cardiovasculares. Además, la fisonomía masculina hace que la operación sea un poco más complicada, por lo que en el caso de los varones el precio de las intervenciones es algo superior al de las mujeres.