Si estás pensando en someterte a un lifting facial debes tener en cuenta cuestiones como cuando realizarte este tratamiento, en qué consiste, cuanto tiempo dura o cuánto tiempo tarda en hacerse visibles los resultados. A continuación resolvemos todas estas posibles dudas.
Todo lo que debes saber sobre el lifting facial
El volumen de la cara en la juventud se encuentra en la porción más alta, en los pómulos y parte alta de la mejilla. Además, la piel del mentón está bien ajustada al borde de la mandíbula. Pero el paso de los años produce un descolgamiento de los tejidos y una atrofia de la grasa, que se desarrolla particularmente a partir de la década de los 40 años.
Una de las primeras cosas que hay que saber es que el lifting facial no puede separarse del lifting de cuello. Se trata de dos operaciones en una y esto se debe a que el descolgamiento de los tejidos se trasmite desde la cara hacia abajo. Las pacientes que más se benefician de un lifting son aquéllas que presentan el descolgamiento y la atrofia, porque van a ver cómo los tejidos se elevan de nuevo y cómo se recobra la armonía facial mediante la inyección de grasa.
El procedimiento consiste en una inyección de grasa combinada con el lifting, ya que corrige la falta de volumen en pómulos y mandíbula. La combinación de la cirugía de lifting con la inyección de grasa permite mayores correcciones que los rellenos o las elevaciones por si solos incluso en combinación con otras terapias.
En cuanto a la duda sobre cuanto puede durar este tratamiento, sabemos que el lifting recoloca los tejidos consiguiendo elevaciones de entre 2,5 y 4 cm. Esto es muchísima elevación, y ninguna otra técnica va a elevar tanto. Por tanto, después de la cirugía es como si retrocediéramos en el tiempo, como si volviéramos atrás y dependiendo de la velocidad de envejecimiento de cada persona, estos resultados perdurarán más o menos tiempo.
Normalmente el resultado es inmediato, pero los primeros días hay hematomas y la cara está hinchada. Lo habitual es que al mes podamos observar el resultado más definitivo.