Volvemos a tratar el tema de la mamoplastia de aumento, pues son cada vez más las mujeres que deciden dar el paso y recurrir a la cirugía para sentirse más cómodas con su pecho.
Es la operación más solicitada por las pacientes junto con la liposucción, y ante las múltiples dudas que surgen, las mujeres suelen recurrir a Internet para encontrar foros de opinión donde consultar o acudir a especialistas en distintas consultas y poder comparar.
Muchas mujeres tienden a imitar a mujeres famosas a las que admiran, y piden un pecho similar. Pero evidentemente las proporciones y la anatomía de cada cuerpo hacen que la cirugía no sea algo aislado sino que ha de relacionarse con el resto del cuerpo para que los resultados sean armoniosos.
En base a estos principios ha de elegirse la forma y el tamaño de las prótesis. No es ya tendencia la excesiva voluptuosidad, sino la naturalidad. La base es atender a la opinión y el consejo del cirujano, que es el que debe recomendar qué prótesis son las más adecuadas en cada caso.
El temor a no poder dar el pecho al bebé tras la operación de aumento es otro de los temores infundados de la paciente. No hay ningún problema en el periodo de lactancia porque la prótesis se coloca detrás del músculo pectoral, no interfiere en el proceso.
Consultar, informarse bien antes de dar el paso, aspectos fundamentales frente a cualquier cirugía.