Hablar de medicina estética y cirugía estética está cada vez más interiorizado en la sociedad. El tabú se ha ido para siempre. Los famosos y los menos famosos están experimentando diferentes manipulaciones estéticas cada vez con mayor frecuencia. Aumento y reducción de mamas, rinoplastia, liposucción, cirugía plástica de orejas… La sociedad demanda cada vez más un sinfín de intervenciones. Pero, ¿Cuál es la diferencia entre cirugía estética y medicina estética? Aunque los dos son diferentes, se complementan en perfecta armonía y están diseñados para adaptarse a las necesidades de todos.
Diferencias entre medicina estética y cirugía estética
El objetivo de la medicina estética es “restaurar, mantener y promover la estética, la belleza y la salud mediante la práctica médica y pequeñas intervenciones limitadas al uso de anestesia local o anestesia local”, señala la Sociedad Española de Medicina Estética. Actualmente, el cuidado estético tanto para hombres como para mujeres está en constante evolución y evolución.
El aumento de la seguridad ha normalizado esta alternativa como parte de un camino integral de salud que pasa a formar parte del cuidado personal de todos. Aunque los dos son diferentes, se complementan en perfecta armonía y están diseñados para adaptarse a las necesidades de todos.
Algunos de los tratamientos más necesarios son el botox, los tratamientos con láser y radiofrecuencia, la penetración de ácido hialurónico o los tratamientos corporales para reducir la grasa y tratar la celulitis. Si bien a veces es difícil distinguir la medicina estética de la cirugía estética, la principal diferencia radica en el propio nombre: la cirugía requiere una intervención quirúrgica, mientras que la medicina estética no.
Este tipo de intervenciones se utilizan para corregir determinadas anomalías o defectos físicos que deben pasar por el quirófano. En estos casos, es imprescindible contar con un cirujano de confianza que tenga experiencia en la consecución de los objetivos. La anestesia es uno de los principales miedos de las personas que se van a operar, pero ‘es uno de los procedimientos más seguros de la medicina’.
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