Como ya hemos comentado, la papada es una acumulación de grasa o descolgamiento de la piel bajo la barbilla. Esta piel contiene poca elastina y colágeno, dos proteínas necesarias para mantener una buena elasticidad y tersura, además de escasas glándulas sebáceas. Además, los músculos del cuello son de los menos ejercitados del cuerpo.
Causas de la aparición de la papada
Esto hace que que esta zona sea más proclive al envejecimiento por lo que es recomendable tenerla hidratada y estimulada para evitar que aparezca la papada. No todas las papadas son iguales ni aparecen por lo mismo. Entre las causas de aparición de la papada hay que destacar:
- Factores genéticos: Si en tu familia los mayores tiene papada probablemente tu la tengas también.
- Envejecimiento de la piel: Aunque no queramos admitirlo, nuestro organismo con el paso del tiempo no es el mismo. La piel pierde firmeza e hidratación y se vuelve más fina, lo que puede derivar en un descolgamiento.
- Obesidad o sobrepeso: Cando se tienen kilos de más, el tejido adiposo puede acumularse en la zona de la barbilla.
- Abuso del teléfono móvil o tablet: La postura con el cuello inclinado hacia abajo mientras se ojea el smartphone o la tablet ejerce presión, y como los músculos de la mandíbula no están preparados para tanto peso, cede y se va rellenando de grasa.
- Exposición solar: No protegerse bien del sol puede dañar la piel de la zona de la mandíbula
- Dieta inadecuada y sedentarismo: Comer muchos alimentos ricos en grasa, no ingerir la cantidad recomendada de frutas y verduras, o no practicar ejercicio físico, hace que la piel pierda sus nutrientes esenciales para estar hidratada y tonificada.
- Pérdida rápida de peso: Cuando se adelgaza de manera brusca la piel de la papada puede quedar vacía y colgante.
Antes de someterse a un tratamiento para eliminar la papada se deben descartar otras posibles causas de la papada asociadas a otras patologías, como el bocio, posibles alteraciones tiroideas, o ganglios, ya que requerirán un tratamiento médico diferente. ¡Llámanos!