Las varices pueden ocasionar diversos síntomas y dar lugar a complicaciones. Lo mejor, sobre todo si tienes factores de riesgo, es tomar medidas para prevenir su aparición.
Causas de las varices
Las venas son los vasos que se encargan de llevar la sangre de vuelta al corazón, lo que se llama retorno venoso. Dada la posición erguida del ser humano, la sangre de las piernas debe ascender, venciendo la fuerza de la gravedad, lo que supone un esfuerzo añadido.
Para facilitar esta tarea, las venas tienen en su interior unas válvulas que impiden que la sangre retroceda, y cuentan además con la colaboración de los músculos de las piernas que, al contraerse, ayudan a empujar la sangre, estableciendo un sentido único hacia el corazón.
Cuando por alguna razón estas válvulas no pueden cumplir su misión de impedir el reflujo, la sangre se acumula, aumentando la presión, dilatando y alargando las venas, y alterando su pared, por lo que puede llegar a salir líquido al exterior de la vena, alterando los tejidos de esa zona.
Factores de riesgo de las varices
Hay situaciones que pueden ser factores de riesgo que predispongan a la aparición de varices como por ejemplo la posición de pie que aumenta la presión de la columna venosa y dificulta el ascenso de la sangre al corazón.
También la herencia ya que, las personas con antecedentes familiares de varices tienen dos veces más probabilidades de padecerlas que las que no los tienen o la predisposición constitucional, una debilidad generalizada del tejido conectivo implica una pérdida de tono de las paredes de las venas.
La edad aumenta el riesgo de padecerlas, el sexo, ya que las mujeres las padecen con mayor frecuencia que los hombres y la obesidad.
El estreñimiento o dificultad para defecar obliga a permanecer más tiempo sentado en el servicio, y a realizar mayores esfuerzos para expulsar las heces. Estos esfuerzos hacen que aumente la presión dentro del abdomen, por lo que también aumenta en las venas abdominales, lo que dificulta la salida de la sangre de las piernas y, por tanto, incrementa el riesgo de padecer varices.
Los anticonceptivos producen retención de líquidos y, por lo tanto, mayor volumen sanguíneo y el embarazo donde aparcen con mayor frecuencia debido a varios factores y, especialmente, por los cambios hormonales, la presión del útero sobre los grandes vasos, y el aumento de peso.
Por último, la falta de ejercicio en los músculos de las piernas hace que estos no colaboren para empujar la sangre hacia el corazón y el tipo de trabajo en los que se tenga que permanecer mucho tiempo de pie que hacen que la sobrecarga sea mayor.