Durante la menopausia, el organismo sufre una serie de cambios que tienen como consecuencia la pérdida de elasticidad y la falta de hidratación de la piel, pero además también se ve reflejada en el cabello y uñas de las mujeres que la pasan.
Cuidado del cabello durante la menopausia
A partir de los 40, el pelo de las mujeres se vuelve más fino, y el cuero cabelludo presenta más sequedad de la habitual. La alopecia suele deberse a factores genéticos, o aparece como consecuencia de alguna enfermedad, por lo que la menopausia no es la causa de la pérdida patológica de cabello, aunque los cambios hormonales que se producen en esta época de la vida de la mujer pueden influir sobre la cantidad y calidad de este.
Diversos factores influyen en el estado del cabello, como la genética, la alimentación, el estrés, el empleo de tintes, el cuidado que se le ha dado… pero si quieres lucir un pelo sano y evitar su deterioro debes:
- Utilizar un champú y mascarilla adecuados a tu tipo de cabello.
- Limitar el uso del secador y otros utensilios como las planchas para el pelo.
- Aplicar al cabello productos que protegen contra la radiación solar, el agua de mar y piscina…
- Hacer ejercicio regularmente para estimular la circulación sanguínea.
- Llevar una dieta sana y equilibrada, que te aporte suficientes vitaminas y minerales como el hierro.
- Consultar con el médico si se te cae mucho el pelo, o lo encuentras más frágil y quebradizo de lo habitual.
Cuidados de las uñas durante la menopausia
Las uñas pueden verse afectadas por diversos trastornos como infecciones producidas por hongos, anemia, problemas de tiroides, enfermedades endocrinas, alteraciones renales o hepáticas, una dieta inadecuada que provoque déficit de vitaminas o de hierro, etc.
Por ello, es importante prestar atención a su estado y acudir al médico si se vuelven frágiles y quebradizas, porque podría ser síntoma de padecer alguna patología.
La deshidratación empeora la calidad de las uñas y aumenta su fragilidad. Las alteraciones hormonales que se producen durante la menopausia pueden afectar a la queratina, la sustancia de la que están compuestas las uñas y que les proporciona resistencia y dureza.
Para cuidarlas, aplícate antes de acostarte, una crema hidratante para manos y uñas, ponte guantes para fregar o si vas a utilizar algún producto químico o irritante, cuida tu alimentación, practica ejercicio regularmente, no te automediques, y consulta al médico si tus uñas se vuelven frágiles y finas o presentan alteraciones en el color.